Desde marzo de 2020 se esperaba un impacto, en la ya desequilibrada a nivel mundial desde el año anterior, Industria del Acero a causa del brote global de Covid-19. La preocupación, desde aquel entonces, eran las bajas de demanda debido al cierre de actividades de algunos sectores, especialmente los manufactureros o distribuidores.
Es un hecho, que a la fecha, algunos gobiernos han tomado medidas con el fin de apaciguar los efectos de la pandemia en la economía en prácticamente todos los sectores, sin embargo la industria del acero se enfrenta a sus propias problemáticas desde antes y más allá de la emergencia sanitaria.
En el caso de China, quien se ha consolidado como el mayor productor de acero, se ha logrado hacer frente a la crisis sin generar grandes pérdidas en los rangos esperados de producción, esto debido a la generalizada automatización de los procesos, lo que ayudó a que los trabajadores pudieran continuar con sus labores desde casa.
Hasta ahora, los expertos consideran que los resultados han sido limitados y que de cierta forma, se ha mitigado el impacto en esta región, pero no de manera extraordinaria.
La industria acerera latinoamericana frente a la pandemia
De acuerdo a indicadores de la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), la producción del mismo enfrentó una caída de 34% en abril pasado, en comparación con los mismos indicadores del año pasado.
La desaceleración, se debió en gran medida al cese de actividades económicas, la baja demanda, aunado a un rezago al acceso general a tecnologías que permitieran la automatización parcial de operaciones.
Actualmente, y de acuerdo a Alacero, el panorama es mucho más optimista para el futuro, y se espera que la producción de acero tenga una recuperación gradual en los próximos meses, logrando atender las demandas del sector.
La misma asociación, recalca que en la región se dio un crecimiento de la producción de junio a julio, en gran medida y gracias a la participación de países como Argentina, Colombia, México y Brasil.
El futuro de la industria
Mientras el escenario actual para la industria del acero a nivel global se percibe estable y con tendencias a una lenta recuperación, es un hecho que permanece cierta incertidumbre con respecto a la economía en los diversos sectores, especialmente lo que se espera para el 2021.
De acuerdo a algunos expertos en finanzas, sería riesgoso asegurar cualquier escenario económico, sin embargo, hay que estar preparados para que estos sean desde una recuperación ideal o hasta otros escenarios más agitados,
Hoy más que nunca, la industria del acero se enfrenta de forma realista a un sector competido y con grandes desequilibrios, sin embargo, los productores de acero en América Latina se mantienen firmes y comprometidos más que nunca, a estar ahí donde se necesite un refuerzo para toda la vida.