Administrar y organizar el presupuesto de una construcción nos permite desglosar las diferentes áreas que componen una obra, como por ejemplo, hacer la prospección de materiales, personal u otros insumos.

Para organizar un presupuesto, debemos aprender a diferenciar qué costos son directos y cuáles son indirectos:

Los costos directos se refieren se asocian directamente a productos finales como los materiales, mientras que los costos indirectos son aquellos que no son productos o tangibles, como pueden ser rentas de inmuebles o pago de asesorías o servicios.

Cualidades básicas de un presupuesto de obra

  • Costo aproximado: Se refiere a la estimación del costo final de cada rubro o de la obra en general, se le suele aumentar entre un 5 y un 10% con el fin de cubrir imprevistos o aumentos de precios.
  • Temporalidad: Nos permite saber si un costo o rubro tendrá una cierta temporalidad.
  • Costos dinámicos: Costos que están sujetos a cambios o variaciones.

¿Cuáles son los rubros de un presupuesto de obra?

Mano de obra: incluye los costos de los trabajadores directamente en sitio,

Materiales: se debe costear todos y cada uno de los materiales.

Medidas: Incluye las cualidades de tamaño que debe tener el material para trabajar.

Accesorios y herramientas: Incluye costos de materiales de trabajo, herramientas y otros accesorios, como los de equipo de protección personal.

Personal administrativo y gastos administrativos: incluyen los costos referentes al personal y actividades administrativas de una obra,  por ejemplo, el área de recursos humanos.

Instalaciones: son costos referentes a la oficina de trabajo.

Documentaciones y permisos: son los costos que incluye el pago de permisos, documentos legales, etc.

Un presupuesto de obra suele dividir los rubros entre aquellos que son preliminares (aquellos gastos que se hacen antes de comenzar la obra); iniciales (gastos que se refiere a la parte estructural de la obra) y gastos en acabados (gastos y actividades que se llevan a cabo después de la base de la obra).

La idea en general es crear un documento ordenado que permita hacer más eficiente las finanzas y la planeación de la obra.